Creo que el 2017 fue un año lleno de sorpresas para mi. Ese año comencé mi terapia y gracias a eso llegaron muchas cosas nuevas. Una de ellas fue que me enamoré de una maravillosa chica. Me arriesgué y pues… Por primera vez comencé a escribir sobre algo más que depresión, tristeza y ansiedad. Comencé a escribir sobre esperanza, sobre amor y aventuras.

Era una chica rara, podía hablar de todos los temas que la mayoría de las personas ni se preocupa por tocar. Y con ella podía. Fue algo que pensé que no podía pasar.

No recuerdo bien, pero creo que esto lo escribí 1 día antes de decirle que si quería ser mi novia 🙂

Lo que está escrito aquí era cuando ya llevábamos tiempo hablando, nos conocíamos un algo, teníamos una lista de cafeterías a las que queríamos ir, hablamos de visitar el Puente Tampico de noche, entre otras cosas. De ahí sale este escrito. Espero lo disfruten.

Dame un día y te diré todas las teorías conspirativas que conozco. No creo en ellas, pero son muy interesantes.
Dame un día y te contaré sobre dimensiones paralelas, la tormenta perpetua en Júpiter, como los volcanes han sido esenciales para la vida y como se creó la Luna.
Dame un día y te llevaré a probar el mejor helado de esta pequeña ciudad.
Dame un día y conoceremos todas las cafeterías que haya cerca.

Dame un día y te contaré como un día un bocho hizo que se me incendiara el pantalón y me dejó una cicatriz.
Dame un día y podremos mirar las estrellas y el cielo nocturno desde el techo de mi casa.
Dame un día y miraremos las luces de la ciudad de noche desde el Puente Tampico.
Dame un día y veremos todas las películas de terror que podamos encontrar, tal vez no sean buenas, pero podremos reírnos de ellas.
Dame un día y escucharemos toda la música que nos guste, no hace falta que hablemos.

Sé que las teorías conspirativas y las cosas del Universo no son el fuerte de todos. Tal vez seas intolerante a la lactosa u odies el café. Tal vez odies las historias y encuentres el cielo aburrido. Tal vez ni si quiera te gusten las películas de terror. Pero sólo dame un día, y si al final de ese día no me amas, te dejaré ir. Sólo uno.

Omar Obregón | 2017