(Fecha original del escrito 06/04/2023)
El primer final después de una relación es justamente cuando escuchas cualquier variación que te indique que tu pareja ya no quiere seguir contigo. No importa la versión de esto. Pero antes de entrar al tema, vamos a aclarar varios puntos.
En algún momento dije que iba a pasar todas mis notas a esta blog, cuando Facebook removió esa función. Entre todas ellas, encontré unas que escribí cuando sentí que La que no debe ser nombrada me iba a terminar. La verdad es que no recordaba haber escrito esto, vamos a variar un poco el formato, primero les dejaré la nota, y después hablaremos de ella.
Esta noche, escribo Esta noche, justo como cualquier otra, estás en mi mente. Y no, no vienes pacifica ni con cuidado. Vienes justo como las demás noches; corriendo por toda mi mente, atravesando distancias y grietas, filtrándote en todos los espacios como algún fluido, hasta que me llenas, hasta que siento que me ahogo de ti. Tal vez la culpa sea mía por dejar la puerta abierta y por eso entras siempre sin tocar. Pero está bien, poner seguro a las puertas sería un desperdicio como quiera, porque estoy seguro que te dejaría entrar sin pensar. Eres a alguien que he esperado por años, ¿quién soy para cerrarte la puerta? Esta noche, justo como cualquier otra, te extraño. Y cada noche que pasa se hace más pesada y triste que la anterior. Eres alguien con quien me gustaría dormir y despertar por las mañanas. Tu calidez es lo que busco cuando despierto en la madrugada, girando en mi fría cama. Eres a la única que necesito en las noches frías en las cuales no puedo dormir. Tal vez es porque ya sé como se siente el dormir contigo, que dormir solo es complicado. Esta noche, me pregunto si alguna vez sentiste lo mismo. Esta noche, justo como cualquier otra, escribo para ti. Escribo las palabras que he guardado por mucho. Escribo oraciones que he mandado al cielo, mensajes que se han ido a la atmósfera, confesiones que he susurrado al viento esperando que, de alguna manera, lleguen a ti. Esta noche, escribo eso que nunca he escrito antes, eso que nunca he tenido el valor de mandar. Tal vez algún día, lo puedas leer y tal vez, te arrepientas de haber besado a un romántico que ama escribir sobre ti. Esta noche, justo como cualquier otra, oraré por ti. Antes de irme a dormir. Antes de volverte a ver en mis sueños. Oraré para el éxito de tus tareas. Oraré para que encuentres tiempo para detenerte, pensar y encontrar una pizca de amanecer entre todas las nubes oscuras bajo las que caminas. También rezó para que encuentres el amor que verdaderamente mereces. Sí el amor que te doy no es suficiente, espero que sea de alguien que te ame verdadera y profundamente más de lo que yo lo hago. Mereces más y no menos. Y con eso, si lo nuestro no puede suceder, rezaré para ser fuerte y aceptarlo, dejar ir y continuar con la vida sin aferrarme a pensar en ti. Esta noche, justo como cualquier otra, continuaré amándote. Pensaré en cómo el amor de alguien puede ser tan real y próspero. Hasta ir a dormir. Hasta que decida que estoy listo para enfrentar tu rostro en mis sueños. Hasta que la letra de la última canción que sonará esta noche deje de resonar en mi cabeza y en mi corazón.Noviembre 2019
Volver a leer esto fue complicado, ¿les ha pasado que hay olores, canciones, películas o fotos que los transportan a determinada época? Pero más allá del momento, los transporta a las emociones que sentían.
Realmente es muy extraño, no sé porqué me quedé en un lugar donde sabía que no me querían ya y que pronto me iban a mandar a la chingada. Solo espero que nadie diga “y por qué no hiciste nada?”, fue tema de conversación (meses después) con La que no debe ser nombrada y dijo “no había nada que hacer, que la decisión ya estaba tomada”, una relación es de dos, si uno no quiere estar, pues nada que hacer.
Las personas procesan su duelo de distinta manera, creo que yo voy superando algunas cosas 4 años después… No sé, hay muchas cosas que no sabría cómo explicarles, es como si… Toda mi vida hubiera cambiado a partir de ese punto y mi cerebro comenzó a procesar tantas cosas de una manera muy diferente.
Me da cierto cringe leer mis entradas anteriores, y no sé si lo que quiero contar ya lo he contado en otras notas, pero creo que no.
En la vida, existen momentos que te cambian absolutamente todo, que son un parteaguas emocional, que después de ese evento ya no vuelves a ver la vida como era antes, que todo tu cambia, que algo se rompe dentro de Lotzo. Las cosas pueden ir muy bien o muy mal, generalmente no hay puntos intermedios, hay personas que se hunden en los excesos y arruinan sus vidas y otras que florecen (después de unos meses o años muy duros) y se vuelven una versión mejorada de sí mismos. Yo me traumé (JA), creo que aumentó mi inseguridad y eso me ha hecho fracasar en futuras relaciones, pero aprendí el secreto y se los voy a compartir….
Entre una novia y otra, pasé 8 años soltero, no tuve ningún ligue en esos 8 años, ni salí con nadie ni nada por el estilo. Eso me hizo perder muchas habilidades sociales y cometí muchos errores con La que no debe ser nombrada a causa de que ya no sabía como socializar con una pareja. tal vez suene raro, pero es como si fuera mi primer novia. ¿Quieren mi consejo? Tengan citas en los inter entre relaciones, solo para que no se les olvide como tratar a otras personas. O simplemente no sean neurodivergentes ni introvertidos, creo que casi todas las personas los prefieren así.
Ahora, para cerrar el tema, ¿por qué el primer final?
Porque el primer final, es al terminar la relación, pero todos los días que vamos viviendo después son otros pequeños cierres, cuando vas descubriendo quien eres nuevamente y vas forjando una nueva personalidad (porque es imposible seguir siendo la misma persona después de una relación en la que te entregaste).
Entonces… ¿Si hay un primer final al terminar una relación hay un último? Respuesta corta, si.
Llega un día en el que todo cambia, es diferente, a veces ya hasta ni piensas en todo eso, al menos ya no de una manera “negativa”. Te das cuenta de todo lo que te aprendiste y que las cosas no volverán a hacer iguales. Te permites ser vulnerable otra vez y dices “chingadamadre, ya quiero que me vuelvan a romper el corazón” y regresas a ser feliz.
Dejaré una canción que está de moda ahorita, pero que me hace sentido para algo así.